Metaanálisis sobre los beneficios de la actividad física regular en la prevención de enfermedades crónicas (Meta-analysis on the benefits of regular physical activity in the prevention of chronic diseases)

La actividad física regular es un componente fundamental de estilos de vida saludable y desempeña un papel crucial en la prevención de enfermedades crónicas. Este estudio revisa la evidencia científica que respalda los beneficios de la actividad física en la prevención de enfermedades como la cardiovascular, diabetes tipo 2, obesidad, hipertensión y ciertos tipos de cáncer. La actividad física mejora los perfiles lipídicos, reduce la presión arterial y mejora la función endotelial, lo que disminuye el riesgo de enfermedad cardiovascular. En cuanto a la diabetes tipo 2, el ejercicio aumenta la sensibilidad a la insulina y ayuda a controlar los niveles de glucosa en sangre. Además, la actividad física, al incrementar el gasto energético, es fundamental en el manejo y prevención de la obesidad, un factor de riesgo significativo para muchas enfermedades crónicas. El ejercicio regular reduce significativamente la presión arterial y disminuye el riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer, como el del colon y de mama, a través de mecanismos como la regulación hormonal, la reducción de la inflamación y la mejora del sistema inmunológico. Fomentar la práctica regular de actividad física debería ser una prioridad en las políticas de salud pública para reducir la carga global de enfermedades crónicas y mejorar la calidad de vida de la población. Palabras clave: actividad física; enfermedades crónicas; Prevención; salud cardiovascular; diabetes tipo 2; Obesidad; Hipertensión; Cáncer. Abstract. Regular physical activity is a fundamental component of healthy lifestyle and plays a crucial role in the prevention of chronic diseases. This study reviews the scientific evidence supporting the benefits of physical activity in preventing diseases such as cardiovascular disease, type 2 diabetes, obesity, hypertension, and certain types of cancer. Physical activity improves lipid profiles, reduces blood pressure, and enhances endothelial function, thereby decreasing the risk of cardiovascular disease. Regarding type 2 diabetes, exercise increases insulin sensitivity and helps control blood glucose levels. Additionally, physical activity, by increasing energy expenditure, is essential in the management and prevention of obesity, a significant risk factor for many chronic diseases. Regular exercise significantly reduces blood pressure and lowers the risk of developing certain types of cancer, such as colon and breast cancer, through mechanisms such as hormonal regulation, infla