El castigo
Es muy probable que usted haya escuchado o leído en más de una ocasión frases del tipo: “No creo en el castigo. El castigo no funciona. El castigo es opresivo o una forma de maltrato. El castigo daña la autoestima. El castigo traumatiza. Se puede y se debe educar solo con refuerzos. Y todo esto está...
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Veröffentlicht in: | Padres y Maestros / Journal of Parents and Teachers 2020-09 (383), p.66-72 |
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1. Verfasser: | |
Format: | Artikel |
Sprache: | eng |
Online-Zugang: | Volltext |
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Zusammenfassung: | Es muy probable que usted haya escuchado o leído en más de una ocasión frases del tipo: “No creo en el castigo. El castigo no funciona. El castigo es opresivo o una forma de maltrato. El castigo daña la autoestima. El castigo traumatiza. Se puede y se debe educar solo con refuerzos. Y todo esto está además demostrado por la investigación”. Pues bien, todas estas afirmaciones son absurdas, medias verdades o incluso falsas. |
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ISSN: | 0210-4679 2255-1042 |
DOI: | 10.14422/pym.i383.y2020.011 |