El fondo regional para la mujer indígena de la región lacustre de Pátzcuaro Zirahuén. Retos y desafíos en su transformación a dispersora de crédito

La convicción de que existe un vínculo virtuoso entre financiamiento y crecimiento económico ha tenido como resultado el impulso gubernamental de los servicios financieros. Las nuevas políticas financieras buscan promover, con particular interés, la inclusión de segment os de la población escasamente atendidos por la banca comercial y la de desarrollo. Uno de los segmentos de población menos atendidos es el localizado en el medio rural. Esto se explica por la amplia dispersión geográfica que lo caracteriza y que ocasiona altos costos de verificación y seguimiento así como por el riesgo de las actividades agropecuarias que se desarrollan en el mismo. Para resolver lo anterior resultan necesarias nuevas figuras de intermediación financiera que operen eficazmente bajo esquema s acordes con las necesidades locales. Tal es el caso del Fondo Regional para la Mujer Indígena de la Región Lacustre de Pátzcuaro Zirahuén Uarhiti Anchikurhiricha A.C. que actualmente atiende – como dispersora de crédito - a 1774 mujeres indígenas dedicadas , fundamentalmente, a las artesanías, el cultivo del aguacate y las actividades pecuarias. La experiencia del mencionado Fondo destaca por su evolución y su alcance entre las mujeres indígenas. Dada la amplitud que implica el análisis de ambos aspectos, el presente texto únicamente se ocupa del primero: la transformación de un Fondo operador de subsidio al de uno dispersor de créditos. La compleja evolución del Fondo, los retos técnicos y financieros que ésta exige aunado a los desafíos que por su condición de género han enfrentado las mujeres que lo encabezan son el objeto de estudio de la investigación que aquí se presenta. Los resultados de la misma muestran que la gestión del camb io depende del convencimiento de quienes encabezan el organismo financiero de la importancia del crédito y de la cabal comprensión de las exigencias y posibilidades del mismo. Pero sobretodo de la convicción de que deben ser ellas mismas quienes lo operen.